Este martes 8 de noviembre se celebra el Día Mundial del Urbanismo, con el objetivo de concientizar a las potencias mundiales acerca de la importancia de planificar comunidades urbanas sostenibles que mejoren la calidad de vida de sus habitantes, reduciendo la desigualdad existente en el acceso a los recursos naturales básicos.
En el marco de esta efeméride resulta fundamental entender todo lo posible acerca del urbanismo, más allá de las definiciones que te mostraremos más adelante. Y para ello hay que conocer diversas claves de este concepto, desde su historia hasta su importancia en la actualidad. ¡Continúa leyendo este artículo y descubre la información que te ayudará a entender qué es el urbanismo!
1. Historia del urbanismo
El inicio del urbanismo se puede rastrear desde la antigua Roma, donde a diferencia de la arquitectura griega que tenía como función principal embellecer sus ciudades, la disposición urbana romana estaba dirigida a ser funcional y útil. Esto no quiere decir que se dejara a un lado la estética y el embellecimiento; sino que se buscó engrandecer al imperio a través de trazas utilitarias y materiales que no habían sido dispuestos con anterioridad para estos fines, como el hormigón y el ladrillo, elementos que disminuían costos de construcción.
Para la segunda mitad del siglo XIX el ingeniero catalán Ildefonso Cerdá, encargado de la remodelación de la ciudad de Barcelona, empleó el término urbe para distinguir los diferentes tipos de ciudades, al mismo tiempo que dio uso a la expresión urbanización para referirse al actuar sobre la urbe. Ya en 1956 la Real Academia Española incluyó la palabra urbanismo a su diccionario, con las siguientes definiciones:
- “Conjunto de conocimientos relacionados con la planificación y desarrollo de las ciudades y de otros núcleos de población”.
- “Organización u ordenación de los edificios y espacios de una ciudad”.
- “Concentración y distribución de la población en ciudades”.
Posteriormente, la Revolución Industrial trajo consigo el crecimiento poblacional de las grandes urbes, lugares donde se concentraba la fuerza de trabajo. Fue por ello que el urbanismo transformó sus puntos fundamentales, algunos de los cuales persisten hoy en día y que te presentamos a continuación:
- Desahogar los centros de las ciudades para una mejor movilidad.
- Incrementar la densidad en esos centros para fomentar la creación de negocios incorporados al sistema capitalista.
- Extender las vías peatonales sin irrumpir los accesos de los medios de transporte motorizados.
- Ampliar el número de áreas verdes como centros de entretenimiento para los trabajadores y habitantes en general.
Es a partir de este momento que nace el urbanismo moderno, que con el paso del tiempo se ha ido transformando y adaptando a los retos del crecimiento poblacional, el impacto ecológico de la mancha humana y el uso de nuevas tecnologías que mejoren la calidad de vida de los habitantes.
2. ¿Para qué sirve el urbanismo?
El urbanismo se encarga de analizar y satisfacer las necesidades de los habitantes de una ciudad, proporcionándoles una óptima calidad de vida. Para ello supervisa y promueve la construcción de trazas que mejoren el flujo peatonal y áreas destinadas al esparcimiento de sus pobladores. A partir de ello se pueden evaluar factores como el impacto de los habitantes de una población establecida y las vertientes que se relacionan con su desarrollo, como el arte, la economía, la higiene o las innovaciones tecnológicas.
Asimismo, el urbanismo vigila y garantiza que las edificaciones de una urbe cumplan con las normativas establecidas por las autoridades competentes. En este sentido verifica el uso de materiales durables y que garanticen un bajo impacto ambiental, entre los que se encuentran el acero, de donde derivan productos que se pueden reciclar en distintas ocasiones, como los perfiles metálicos, o algunos tipos de cemento que produzcan menos emisiones de CO2.
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3. Características del urbanismo
Las características del urbanismo en arquitectura se establecen a partir del tipo de suelo sobre el que se va a construir (urbano, rústico o urbanizable), puesto que estas clasificaciones gestionan la cantidad, calidad y función de cada uno de los espacios de una ciudad. A continuación, te presentamos las características (reglas o aspectos) más importantes con las que debe cumplir el urbanismo:
- Control de la densidad de población: para llevar a cabo un proyecto urbanístico, es necesario conocer el impacto ambiental que genera, ya que, con base en la explotación de los mantos acuíferos y los recursos naturales de la zona, se determina la cantidad de población máxima que es capaz de albergar.
- Infraestructura vial óptima: el desarrollo urbano relacionado con el transporte, se encarga de reducir al mínimo las emisiones de CO₂ ocasionadas por los vehículos que usan combustible licuado del petróleo. En este sentido se pueden implementar estaciones de carga para vehículos eléctricos y la creación de vías especiales para el transporte público y vehículos alternativos como bicicletas.
- Áreas verdes: una de las medidas con mayor impacto dentro del urbanismo, son las azoteas verdes, espacios ubicados en conjuntos habitacionales, edificios públicos y desarrollos industriales que fomentan el cultivo y cuidado de vegetación endémica que contribuya a la mejora del clima, la humedad y la calidad del aire en las grandes urbes.
- Manejo responsable de los desperdicios: a través de estas medidas, se controla y mejora la calidad en los sistemas de reciclaje de los desechos que se generan en las ciudades, así como los producidos por la industria de la construcción. Por lo que, un manejo responsable de este tipo de residuos, contribuye a mantener espacios urbanos limpios y a disminuir la contaminación ambiental.
- Cuidado del agua: actualmente, el problema más serio al que se enfrenta el urbanismo, es el cuidado y suministro de agua para consumo humano. Ante esta situación es vital crear una buena infraestructura hidráulica y dar mantenimiento adecuado a la que ya se tiene. Asimismo, es fundamental concientizar a la población acerca de este recurso natural.
4. Tipos de urbanismo
Como ya se dijo anteriormente, una buena planeación de los aspectos más importantes que componen una ciudad es fundamental para resguardar la calidad de vida de sus habitantes, es por ello que el urbanismo se divide en varios tipos para cubrir cada una de estas necesidades. En seguida te hablamos de los más importantes:
Urbanismo táctico
Se trata de una vertiente enfocada en la transformación de una ciudad hacia un modelo más amable con el peatón, siendo este último el principal beneficiado en temas de movilidad y transportación. Como resultado de este modelo, se favorecen las áreas verdes y recreativas, tienden a aumentar los espacios públicos y se fomenta el uso del transporte público o transportes ecológicos.
Generalmente estas propuestas se originan dentro de la sociedad civil; sin embargo, no están exentas de recibir apoyo gubernamental, tienen un gran recibimiento entre la población y se votan a través de la participación ciudadana. Sus costos de realización son bajos comparados a otros presupuestos, ya que aprovecha los espacios vacíos y los reutiliza.
Urbanismo sostenible
También denominado urbanismo ecológico, transforma aspectos ya gastados del urbanismo moderno para adaptarlos a tres pilares fundamentales de la sostenibilidad: sociedad, economía y medio ambiente. Se enfoca en lograr un equilibrio entre las zonas urbanas y el medio ambiente a través de la reducción de desechos y contaminantes, la disminución de los gases que ocasionan el efecto invernadero y, por lo tanto, el aminoramiento del calor que generan las urbes.
Equilibrar la calidad de vida y el impacto ecológico no es tarea fácil, por lo que este tipo de urbanismo evalúa las condiciones socioeconómicas y demográficas para realizar mejoras responsables. Busca dar un valor añadido a los activos, además de aumentar el rendimiento laboral por medio de beneficios integrales para el trabajador, y por sobre todas las cosas, reducir los desechos, re aprovechar ciertos materiales, y disminuir considerablemente la contaminación.
Habitacional
Es probablemente el tipo de urbanismo más conocido. Esto se debe, en gran medida, a que se encarga de organizar las zonas de desarrollo residencial y es responsable de planificar el tipo de viviendas que se van a construir en determinadas áreas, basándose en la cantidad de población que las va a ocupar y su nivel socioeconómico.
Las zonas de desarrollo residencial son de las más complicadas de planear, debido a la cantidad de servicios con los que deben contar, por eso es sumamente importante su buena planificación y determinar bien los tipos de vivienda que se van a construir, ya sean unifamiliares, departamentales o residenciales.
Industrial
Esta variante del urbanismo se encarga de planificar y organizar los espacios destinados a alojar distintas empresas con naves industriales, sus centros de producción y de logística. Estos últimos comúnmente se disponen en los llamados polígonos industriales y según el giro al que pertenezcan, son ubicados más o menos próximos a las zonas habitacionales, puesto que el ruido, el uso de maquinaria y transporte pesado, así como la contaminación que producen, afectan el desarrollo habitacional.
Urbanismo de servicios
El urbanismo de servicios es el encargado de administrar y ubicar los centros provisorios de servicios a las zonas residenciales, como centros comerciales y mercados. La traza establecida por el también llamado urbanismo comercial para estas edificaciones, indica que se deben encontrar en zonas aledañas o bien, que su acceso sea fácil y rápido.
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Racionalista
Por último, este tipo de urbanismo se deriva de la arquitectura racionalista, la cual está a favor de las formas puras que ha olvidado el modernismo. Asimismo, se encuentra influenciado por el cubismo, por lo que sus construcciones prescinden de decoraciones, de técnica concebida y de una industria capitalista que las lleve a cabo.
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5. Importancia del urbanismo
Ahora que sabes qué es el urbanismo, seguramente tienes una idea muy clara sobre su importancia en la actualidad. Y es que para la mayoría de los gobiernos es relevante disponer de estrategias que permitan el desarrollo de sus grandes urbes, que aseguren la calidad de vida de sus habitantes, que cuenten con los servicios básicos y al mismo tiempo sean sustentables. Es aquí donde el urbanismo y la arquitectura cobran una gran importancia, pues estas disciplinas son las encargadas de gestionar todos estos requerimientos.
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